Hoy entrevistamos a Carlos Martínez-Conde, el ganador del II Torneo Alumni UCM de Ajedrez celebrado el pasado 16 de septiembre en las instalaciones de la Universidad Complutense de Madrid, con la colaboración de la Federación Madrileña de Ajedrez. Trasladamos a Carlos nuestra más sincera enhorabuena y el agradecimiento por haber participado en el II Torneo Alumni UCM de Ajedrez.
Mi interés comenzó de pequeño cuando mi padre me enseñó las reglas. Me gustó y solía jugar bastante, aunque lo acabé dejando por un tiempo. No fue hasta los 13-14 años que volví a jugar.
Después del segundo torneo que jugué en mi vida. En el primero me enseñaron lo que era el ajedrez de competición (me aplastaron en casi todas), y más tarde vi algún vídeo por curiosidad. El altísimo nivel de profundidad de los buenos jugadores me enganchó y pronto no podía parar de aprender y practicar. Más tarde jugué el mismo torneo al año siguiente, y ya obtuve ciertos resultados, lo que me motivó a federarme.
Sí: comencé a jugar torneos regionales sobre los 16 años (antes sólo provinciales) y nacionales más o menos a los 17. Actualmente suelo participar en campeonatos nacionales y lo cierto es que me ha ido bastante bien (sobre todo este año), aunque siempre son durísimos.
Si pudiera sí. Aunque es muy difícil conseguirlo, sigue siendo mi sueño y trato de luchar lo máximo posible. Al fin y al cabo, creo que lo importante es perseguirlo y dar lo mejor de uno mismo.
Generalmente no suelo jugar, pero por otros motivos. En los móviles se puede jugar bastante bien, y hay algún club en la Facultad de Físicas con tableros donde la gente puede ir a jugar (Rolatividad). Sin embargo, suelo dedicar más tiempo a estudiar y entrenar ajedrez que a jugarlo.
No diría que haya un interés especial, pero sí que veo a muchos estudiantes que les gusta echar partidas en sus ratos libres. Al menos en mi clase, no es raro ver a gente jugar alguna partida de vez en cuando, aunque no creo que haya mucho interés por el ajedrez de competición.
Por supuesto. Creo que es una buena iniciativa que siempre puede llamar la atención a aquellos que nunca hayan visto un torneo y, con suerte, puede que se enganchen a este bonito mundo. Además, se pasa un buen rato jugando y compitiendo en un ambiente muy deportivo.
Muchas gracias, Carlos. ¡Esperamos verte en los próximos torneos!